Charlar.
Añoraba tener una buena conversación de esas sin tapujos donde el tema va cambiando acorde al fluir de los pensamientos. Donde alguien quiere escuchar tanto como yo lo que el otro quiere decir y mas que nada sentirme, sentirnos a gusto con lo que esta pasando. Un amigo me llevó a recordar esas cosas que solía pensar y que por situaciones de la vida las dejé un poco olvidadas. Como si hubiera un mundo atrás de las cosas aun mas grande de lo que pensábamos, como si el limite fuera la nada y el todo. Por sobre todo hacer reír a alguien sinceramente y tirarnos flores. Las definiciones son mucho mas extensas y ricas de lo que recordaba y son hermosas. Quien me conoce, sabe que amo hablar y bailar. Y con mi amigo charlo y de contenta ando ordenando, cocinando y bailando por ahí. Al hecho de bailar siempre lo pensé como el olvido de uno mismo en movimientos liberadores por así decirlo. Me gusta encontrarme con sorpresas tan disfrutables.