Lo inevitable, el observar.
Hay ciertas imágenes que uno no puede evitar mirar, es como si te atrayera completa e involuntariamente cierto evento, situación, la cual uno no puede obviar. Quieren ser observadas y no hay nada que puedas hacer mas que desviar la mirada luego del casi minuto que estuviste encadenado a contemplar. O son cosas muy terribles, como accidentes o muertes, robos. O son cosas demasiado bellas por asi decirlo, por que a decir verdad "bello" no lo define.
No hace mucho paseaba por la hermosa Florida y no se por qué gire la cabeza y vi a esta hermosa espalda de un chico agachado arreglando su auto sosteniendo con una mano el capot y con la otra engrasada tocando cosas que no sabría decir que son. No era solo el chico lo llamativo ni siquiera su tatuaje de letras en la hipotética suave espalda, era su entorno también, el pseudo garage lleno de yuyos crecidos en el piso, la reja de pintura saltada, la feaciente muestra de que nadie se ocupaba de ese lugar y en el medio de este espectaculo de colores cobre estaba este auto que tenía mas de oxidado que de chapa. Y él ahí con los músculos marcados en los hombros, cabeza inclinada. No le vi la cara, tampoco importa, era el cuerpo, eso que es tan característico a todo ser humano animal, la atracción sin ningun fondo de razonamiento, el cuerpo por el cuerpo la piel por la piel la carne por la carne.
Como dije antes, estan esos momentos hermosos que te roban la atención y estos terribles. No hace mucho caminaba en el pasillo de terapia intensiva y de una de las habitaciones tapadas por cortinas estaba esta silueta que se entrevia por las averturas, no se movia su pecho, no respira, era una especie de juguete que nada de alma tenía, sentí lo que se llama "frío en la nuca" y seguí adelante un poco triste por que a ese señor no lo venian a visitar nunca, casi por los dos meses que estuvimos ahí. Fue cuando cerraron la entrada a terapia que entendí que había muerto.
No se por qué estamos llamados, por asi decirlo a presenciar ciertas cosas en nuestras vidas, cosas que nos moldean ligeramente y nos muestran de lo que somos capaces o no, tanto de sentir, pensar, hacer. No entiendo como funciona esto del cuerpo y su deterioro con el paso del tiempo, no entiendo como es que algún día voy a mirar a mis manos y van a estar tan cambiadas.
Este no es un post deprimente es uno de esos que retratan las percepciones de un mundo que nos rodea.
No hace mucho paseaba por la hermosa Florida y no se por qué gire la cabeza y vi a esta hermosa espalda de un chico agachado arreglando su auto sosteniendo con una mano el capot y con la otra engrasada tocando cosas que no sabría decir que son. No era solo el chico lo llamativo ni siquiera su tatuaje de letras en la hipotética suave espalda, era su entorno también, el pseudo garage lleno de yuyos crecidos en el piso, la reja de pintura saltada, la feaciente muestra de que nadie se ocupaba de ese lugar y en el medio de este espectaculo de colores cobre estaba este auto que tenía mas de oxidado que de chapa. Y él ahí con los músculos marcados en los hombros, cabeza inclinada. No le vi la cara, tampoco importa, era el cuerpo, eso que es tan característico a todo ser humano animal, la atracción sin ningun fondo de razonamiento, el cuerpo por el cuerpo la piel por la piel la carne por la carne.
Como dije antes, estan esos momentos hermosos que te roban la atención y estos terribles. No hace mucho caminaba en el pasillo de terapia intensiva y de una de las habitaciones tapadas por cortinas estaba esta silueta que se entrevia por las averturas, no se movia su pecho, no respira, era una especie de juguete que nada de alma tenía, sentí lo que se llama "frío en la nuca" y seguí adelante un poco triste por que a ese señor no lo venian a visitar nunca, casi por los dos meses que estuvimos ahí. Fue cuando cerraron la entrada a terapia que entendí que había muerto.
No se por qué estamos llamados, por asi decirlo a presenciar ciertas cosas en nuestras vidas, cosas que nos moldean ligeramente y nos muestran de lo que somos capaces o no, tanto de sentir, pensar, hacer. No entiendo como funciona esto del cuerpo y su deterioro con el paso del tiempo, no entiendo como es que algún día voy a mirar a mis manos y van a estar tan cambiadas.
Este no es un post deprimente es uno de esos que retratan las percepciones de un mundo que nos rodea.
Creo que tienes razón en todo lo que dices, las cosas son así
ResponderEliminarmuaaak
tan cierto no puede ser.
ResponderEliminartan bello no puedes escribir:) y lo dijo en serio.
me engancho en seguida con tu escrito.
es similar para no decir igual la forma en la que pienso.
si decides escribir un libro yo lo compro.jaja
da ese entendimiento eh acompañada de humor que es lo que gratifica.
espero que tengas tiempo de actualizar que encantada te leo.
un enorme beso desde
theperfectmanualforuadacity.blogspot.com